Caray, qué impresión. Puedo asegurarte que mientras escuchaba esos rugidos mi perro miraba en todas direcciones, buscando donde podía esconderse esa mosca cojonera. Y es que mi chucho siempre marca distancias con los canes enanos. Él pertenece a otra categoría animal, o eso cree. Mi perro es un fox-terrier.
Caray, qué impresión.
ResponderEliminarPuedo asegurarte que mientras escuchaba esos rugidos mi perro miraba en todas direcciones, buscando donde podía esconderse esa mosca cojonera.
Y es que mi chucho siempre marca distancias con los canes enanos. Él pertenece a otra categoría animal, o eso cree.
Mi perro es un fox-terrier.
jejeje
ResponderEliminarMe imagino al pobre animalito desconcertado, buscando la fuente de los aullidos...
Menuda escena ha tenido que ser.
¡Un saludo!