Freixenet se sacude la caspa
El anuncio de Freixenet es toda una institución mediática en España. Cuando empieza a circular, somos conscientes de que la cuenta atrás es imparable: la navidad se nos viene encima con su ciclón de mazapanes, excesos de toda índole, propósitos de enmienda que volverán a pillarnos con las bragas de enero, y sonrisas impostadas. Pero además de un pistoletazo de salida, es también un símbolo de los tiempos. Y el de este año me gusta. Deja atrás esos años casposos en los que había que recurrir a una estrella añosa y decrépita de otras latitudes para darle majestuosidad al asunto. Ya no hace falta que el prestigio venga de fuera, y eso es todo un signo: entre aznares y zapateros, nos hemos hecho adultos. Es una gozada ver a una espléndida Gemma Mengual chapoteando en el agua dorada con su equipo de natación sincronizada: juventud, empeño, y arte: esa es la España que me gusta...
soplo de Mberzosa en twitter.
Desde luego este año si nos podemos sentir orgullosos del anuncio,más que nada por lo qué comentas,antes recurrían a estrellas de fuera ya caducas,como si nos avergonzáramos de lo español.Tenemos mucho talento aquí,a la vista está.
ResponderEliminarMayka: otra cosa sí habrá, pero talento... también. Desde luego, ya iba siendo hora de mirar hacia dentro.
ResponderEliminar¡saludos!
la publicidad de Freixenet con caspa o sin es similar de mala, la prueba está en la de este año.
ResponderEliminarDe momento la gente está hablando de ella. ¿Eso en publicidad no es malo no?
ResponderEliminar¡saludos!